La humanidad ha tenido que pasar por situaciones muy difíciles, debido a los conflictos bélicos que han acontecido a lo largo de la historia; los cuales han dejado huellas imborrables en la población, entre ellas la hambruna, la desolación y la pobreza extrema, que se obtiene por destinar los recursos de las naciones a la guerra.
Estos hechos hostiles, han sido los causantes del desabastecimiento alimenticio en las ciudades y en el campo. Recordemos que para la guerra se necesita mano de obra…y para esto era necesario reclutar hombres fuertes que pudieran sostener un arma y luchar, los mejores prospectos estaban en los campos, dejando así, abandonadas las lacenas del país; solo quedaban las manos frágiles de mujeres, niños, y ancianos que no alcanzaban a rendir para producir alimento y llevar a las ciudades, y así las grandes metrópolis sufrían el hambre.
Debido a estas amargas experiencias, nacen los llamados jardines de la victoria en Estados Unidos, Canadá y Reino Unido, con el objetivo de mitigar el hambre; este es el inicio de la agricultura urbana como herramienta de compensación para sostener la vida.
Los tiempos no han cambiado mucho desde la Primera y Segunda Guerra Mundial, seguimos con hostilidad, y a esto le sumamos los ambientes artificiales en los cuales vivimos, alejándonos de los ritmos de la naturaleza. Es nuestra prioridad volver a conectarnos con ella, y una de esas formas es SEMBRANDO EN CASA, practicando la agricultura urbana.
Es bueno saber que cada vez que estamos en contacto con la tierra, recibimos de ella una gran cantidad de energía revitalizadora; enseñan los sabios taoístas que por las palmas de las manos encontramos centros energéticos que absorben los fluídos de la tierra y generan salud al cuerpo. Por eso se recomienda a aquellas personas que trabajan mucho tiempo con artefactos electrónicos, con computadores, en lugares encerrados como oficinas donde hay mucha energía estática, o ambientes donde agentes químicos estén en el aire… que practiquen la agroterapia, otro de los beneficios que tiene esta bella actividad es ayudar a controlar las emociones.
En la actualidad en España y otros países, se están haciendo huertas urbanas en reclusorios y hospitales mentales, ya que se han visto buenos resultados en los pacientes y reclusos, por que esta actividad ha menguado los niveles de agresividad y ha mejorado la paz mental. Si esto se logra en lugares así, ¿pueden imaginar qué podemos conseguir SEMBRANDO EN CASA?
Cuando empezamos a sembrar, nuestro cuerpo comienza a disponerse para recibir bienestar, ya que esta actividad ayuda a disipar aquellas afecciones que nos atacan, por ejemplo, mejora el sueño, relaja el sistema nervioso, ayuda a tener actividad física, mejora la presión arterial, es medicina para el alma, cuerpo y mente, genera más O2 en el ambiente, se obtiene un lugar seguro de alimentos saludables, genera más sensibilidad al cuidado por la vida, convirtiéndose también en un bello espacio de relax.
Sabiendo todo esto ¡pongámos manos a la obra y comencemos nuestro hurto urbano!
Pasos para sembrar en casa
1 Elige el lugar donde vas a establecer tu huerto: para esto es indispensable tener en cuenta la luz, el aire y el agua, debemos ubicar nuestro huerto en un lugar luminoso, donde los rayos del sol lleguen y abracen las plantas con su calor, de igual manera que tengamos buena disposición de agua y aire para refrescarlas, y así las plantas estarán felices.
- Qué deseamos sembrar: para huertos urbanos recomendamos especies de raíces cortas que no necesiten de mucha profundidad para su desarrollo, caso de hortalizas y algunas frutas y especias, más también podemos empezar a desarrollar huertos un poco más grandes, donde tengamos especies de plantas alimenticias de mayor tamaño como melones, sandías, papas, etc., ahora podemos tener en nuestras casas gran variedad de alimentos.
- Las macetas: éstas dependen de los recursos que tengamos, puede ser una linda y elegante plantera, o tomar un recipiente plástico y hacer de él una bella maceta, los juguetes olvidados de los chicos también son una buena opción ¿Se imaginan una volqueta de juguete o una carreta con unos bellos tomates o cebollas? Se verán hermosos, podemos usar las ollas viejas, esos recipientes de la cocina que ya no utilicemos, y que cumplan con la profundidad que se requiere para el buen desarrollo de las plantas, los huacales (cajones de madera) donde vienen las frutas, zapateros y otros, son muchas las posibilidades que podemos tener para la siembra ¡usa tu creatividad!
- El suelo: factor importante para que nuestro cultivo esté muy bien. Debes elegir un buen sustrato con buena porosidad, y rico en nutrientes, éste se puede comprar en viveros o agropecuarias, o con un amigo o vecino que te dé tierra de sus campos, y lo mejoras aplicándole humus o compost para que éste sea óptimo para tu huerta.
- Abonos: Son los suplementos nutricionales de tus plantas, por lo tanto debemos elegir lo mejor… humus de lombrices, compost, biopreparados, todo lo que entre en la línea orgánica, estos insumos los puedes conseguir en un vivero, o tiendas agropecuarias, o lo mejor, lo puedes hacer tu mismo con el manejo de compost en tu casa, con los desechos orgánicos que salen de tu cocina… más éste es otro tema para una nueva publicación.
- Luz y agua: factores importantes en el desarrollo de las plantas, ni mucho ni muy poco, todo depende de la especie que vas a cultivar, lo que si queda claro es que las plantas no deben ser inundadas, y tampoco dejarlas en la sequía. Equilibrio es la clave para su bienestar, la luz es fundamental en el proceso de fotosíntesis, mas no quiere decir, que se deben quemar por el astro rey, por eso el lugar donde estén los rayos del sol, las debe abrazar suavemente.
Teniendo todo esto claro ¡SEMBREMOS!